Pompón, Mechón, Estrellita y Nubecita son cuatro ardillitas que viven en un hermoso bosque muy cerca de un jardín de nueces. Las cuatro ardillitas tienen sus casitas en un mismo árbol que adorna el ambiente del bosque con colores que Dios le dio con su gran paleta de artista; entre las ramas resaltan el marrón y el amarillo, en sus hojas el verde con algunos tonos en naranja, mientras que el rojo deja escapar sus tonos en los pequeños frutos silvestres.
Un día Mechón, la ardillita más glotona dice a las otras: ¡tengo hambre! ¿Que tal si vamos al jardín de nueces? Y todas dijeron al mismo tiempo ¡Sí Vamos! Y se pusieron en marcha hacia el jardín de nueces.
De pronto Pompón se cayo cuando saltaba de una rama a otra, cuando oyeron el ruido se detuvieron, para ver que le había pasado a Pompón, y él dijo:
- estoy bien la rama estaba cerca del suelo.
Mechón se puso a reír. Ja, ja, ja, ja, ja, - Pompón si no sabes correr te puedes quedar.
Estrellita le dijo a Mechón:
-Eso le puede pasar a cualquiera, vio a Pompón y le dijo no hay apuro, si te duele algo tranquilo, que ya llegaremos al jardín de nueces.
Nubecita dijo:
- Si puedes caminar vamos un pasito, otro pasito y otro pasito, ya casi llegamos.
- Mechón dijo porque no lo dejamos aquí mejor así tendremos más para comer.
- Nubecita dijo somos amigos y los amigos están juntos para compartir las buenas y las malas.
- Si era jugando repuso Mechón.
- Además yo puedo caminar. ¡Vamos! dijo Pompón.
Más adelante en el camino, Estrellita piso una ramita seca que se partió y junto con el sonido Crack se oyó un gran grito. Nubecita le pregunto, ¿qué te pasó?
- Me doble una patita, pero fue más el susto porque mi corazoncito hace punkin, punkin, punkin, punkin muy rápido, dijo Estrellita.
- Ja, ja, ja, ja, otra menos, mejor nos regresamos, porque no voy a aguantar la risa con otra caída dijo Mechón.
- Pompón le dijo: ¡eso le puede pasar a cualquiera!.
-¿Estrellita puedes seguir? Pregunto Nubecita.
- Si, ya me tranquilice.
Siguieron su camino, al rato ya se veía el jardín de nueces y de pronto se oyó un ruido muy fuerte, todos voltearon, era Mechón que había caído y se había quedado atrapado en la corteza de un árbol.
Las tres ardillitas se acercaron y rápidamente lo sacaron de la corteza, esta vez Mechón no reía, sino que lloraba y sus amiguitos le preguntaron.
-Mechón ¿porque lloras? ¿Estas bien? ¿Te rompiste algo? Pregunto Estrellita.
- No, no, no, no me rompí nada, lo que pasa es que ví, que yo me caí y todos me ayudaron, nadie se burlo de mí y cuando les paso a ustedes yo me reí y no ayude, perdónenme que no lovuelvo a hacer dijo Mechón .
- ¿Puedes seguir o nos regresamos? Pregunto Nubecita.
- Si puedo dijo Mechón además ya estamos muy cerca y muero de hambre.
Corrieron hasta llegar al jardín de nueces donde compartieron nueces y risas.
Edna Suárez de Vivas